Hace unos cuantos años, exactamente en 1991, nuestro compañero Félix Muñoz escribió este reportaje sobre las lisas, uno de los peces más buscados en las competiciones de pesca deportiva.

Este escrito se publicó en la entonces revista de la Sociedad, la revista «Calada». Aunque pasen los años y los materiales utilizados para la pesca han ido evolucionando, los peces siguen siendo los mismos de siempre, así que toca recordar aquellas líneas. Cabe recordar también que en nuestras agua conviven 6 especies distintas de la família de los mugílidos, el corcón (Chelon Labrosus), el galupe (Liza aurata), el capitón (Liza ramada), el pardete (Mugil cephalus), la galúa (Liza saliens) y la caluga (Oedalechilus labeo), aunque comunmente siempre las llamemos a todas «lisas» o «mújoles».

La «Llisera»:

Es una especie gregaria que se mueve a lo largo de la costa, penetrando en los puertos, lagunas salobres y ríos; se agrupa en bancos compuestos generalmente por individuos de la misma edad y tamaño similar. Su alimentación es omnívora, buscando constantemente comida, que consiste en pequeños animales, detritus orgánicos y algas, los cuales recoge entre la arena o las rocas del fondo.

Desde las primeras horas de la mañana, la “llisera” nada cerca del fondo buscando su alimento, para permanecer a la sombra de las rocas o pasarelas en las horas más calurosas del día.

Se trata de un pez muy desconfiada, que se asusta fácilmente, incluso de una sombra. Su sensibilidad aumenta cuanto más reducido sea el banco del que forma parte.

Un requisito importante para detectar la picada de la “llisera” es usar, siempre que sea posible, el mismo flotador, para conocer con detalles sus reacciones, puesto que la “llisera” no pica siempre igual.

En las escolleras o rocas en mar abierto, con oleaje, la picada hunde el flotador varios centímetros, mientras que sin oleaje se producen pequeñas frenadas del flotador justo cuando empieza a sumergirse.

Si se pesca en fondos rocosos, la picada produce una subida del flotador, el cual queda completamente plano sobre la superficie del agua. Cuando existe corriente, podremos notar la picada observando que la deriva del flotador en la corriente se interrumpe, mientras que en aguas quietes podremos notar unos pequeños círculos u ondas concéntricas alrededor del flotador, que permanece inmóvil.

Una vez clavada, la “llisera” se defiende con amplios movimientos de derecha a izquierda hasta llegar a la superficie , momento en que intenta volver a bajar hacia el fondo. Se trata de una pesca muy interesante y deportiva, por el carácter luchador de la presa.

*Félix Muñoz Rodríguez pertenece a nuestra Sociedad ininterrumpidamente desde 1.975, donde ha competido (y lo sigue haciendo en nuestros campeonatos sociales) en distintas modalidades, como el corcheo, surfcasting, ciprínidos, salmónidos y embarcación fondeada, habiendo en su palmarés numerosos campeonatos sociales, provinciales, campeón de Catalunya y Campeón de España.