Esta semana se ha publicado en el periódico «L’ESPORTIU» un articulo escrito por el vicepresidente y delegado de Mar-costa de nuestra Sociedad Christian Buscemi subre la pesca de competición en la modalidad corcheo-mar. Para quienes no lo hayan podido leer en el periódico, os dejamos por aquí el artículo y también el texto original. Esperemos que os guste.

La pesca de competición de corcheo-mar

La actividad de la pesca en el mar (y también en los ríos y el resto de aguas continentales) es casi tan antigua como la humanidad, empezó como una actividad de subsistencia, evolucionó como actividad de ocio y finalmente se convirtió en deporte, existiendo a día de hoy las tres variantes.

La evolución de esta actividad ha sido contínua a lo largo de los años, adaptándose a las distintas especies, épocas del año y sobretodo a los escenarios donde se practica. Quizás la modalidad más antigua que se practica es la de pesca con boya, pues inicialmente era la que se podía practicar únicamente con una caña a la que se le ataba un hilo (inicialmente de origen vegetal), con un flotador hecho con una pluma, madera o corcho y con un anzuelo con un cebo en la otra punta. Materiales muy básicos y rudimentarios, pero efectivos para poder pescar los peces que vivían más cerca de la orilla. La evolución de los materiales hizo que poco a poco aparecieran nuevas modalidades de pesca, como cuando se empezaron a desplazarse las fibras vegetales para dar paso primero a los hilos de origen animal (seda) y se fabricaron los primeros carretes de pesca, que permitían empezar a pescar a cierta distancia, disciplinas que tuvieron el cambio definitivo al ver la luz el nylon y la revolución mecánica de los carretes mecánicos a base de engranajes y materiales cada día más evolucionados para rea lizar las cañas y componentes e éstas como pueden ser las anillas.

Pese a la llegada de modalidades como el lanzado o surfcasting, spining, jigging, fondal, pesca con cebador, etc. la pesca con boya en el mar sigue siendo una actividad completamente a viva actualmente, pero que pese a conservar la esencia de su origen, como es intentar capturar las especies que más se acercan a la orilla, la tecnología que hoy la rodea dista mucho de la de sus inicios.

Las cañas empezaron siendo de origen natural, primero las «cañas del país», después las de bambú y de aquí se pasó a la fibra de vidrio, que permitía poder tener cañas más largas y ligeras, además de ocupar mucho menos espacio una vez plegadas. Pero la fibra de vidrio seguía siendo pesada y demasiado blanda para hacer canyas para esta modalidad que podían llegar hasta los 10 metros de longitud, así que la revolución definitiva llegó al entrar en escena los diferentes tipos de fibras de carbono, que cada día están más evolucionados aportando ligereza y resistencia a la que quizás sea la herramienta más importante del deportista que busca la excelencia en sus resultados.

Los hilos de pescar o líneas también han sufrido su propia evolución, pues a dia de hoy existen hilos específicos para cada ocasión, los hay flotantes, otros que no, los hay más flexibles y también de más rígidos, de nylon, de fluorocarbono, de fluorine, también trenzados. Un mismo deportista puede utilizar más de 10 tipos de hilo distintos en una sola jornada de competición.

Pese a que en el origen de esta modalidad de pesca ésta se practicava sin carrete, donde la línea se fijaba de diferentes maneras a la punta de la caña (pesca al «coup»), actualmente lo más común es practicarla con carrete, que permite disponer de una reserva de línea que sirve para poder pescar a cierta distancia y al tener esta reserva de hilo también ofrece la oportunidad de pescar con líneas más finas.

Las boyas, cochos o flotadores también han evolucionado mucho desde sus orígenes, las plumas, las púas y el corcho han pasado a una segunda línea y actualmente la madera de balsa y materiales sintéticos son los encargados de mantener el indicador de picada justo en la línea del agua.

Los anzuelos y lastres también han cambiado mucho, los primeros suelen ser de acero o de carbono afilados químicamente o con láser y los segundos han ido dejando atrás el plomo por otros materiales como el tungsteno.

En esta modalidad quizás uno de los elementos más vistosos son los asientos que se utilizan, pues aquellas antiguas sillas dejaron paso a los cajones de madera y de éss a los paniers (que provienen de la pesca en aguas continentales). A los panieres de pesca se les pueden acoplar infinidad de accesorios para hacer más cómoda la pesca, no sólo por los cómodos acolchados para los glúteos, sino también por los pequeños cajoncillos para guardar los aparejos, bandejas para colocar engodos para atraer a los peces, cebos, trapos, herramientas, sombrillas, apoya-cañas y salabre, etc.

Pero quizás el cambio más importante de los últimos años, el marca más la diferencia entre el pescador deportivos y el resto, es la captura y suelta de las capturas, por eso en esta modalidad es imprescindible el uso del rejón o nasa. El rejón o nasa es una red que consta de varios anillos concéntricos y que permite mantener vivas las capturas para poder devolverlas vivas a su medio, ya sea después de una jornada de entreno o después de una jornada de competición y tras el pesaje de éstas. La captura y suelta de los peces es una de las normas de la pesca a corcheo-mar, ya que el respeto por el medio de los deportistas que la practican es fundamental, ya que son ellos los primeros interesados de que éste goce de una buena salud, sin un medio en buen estado no se podría practicar este deporte.

Actualmente hay un alto nivel entre los deportistas que practican la pesca en la modalidad de corcheo-mar, un deporte que lo pueden practicar tanto los más jóvenes como los más veteranos, pero que también requiere una buena forma física para obtener buenos resultados en competición, los reflejos y la concentración son básicos, así como un entreno contínuo para tener muchas agilidad para adaptarse a todos los cambios que contínuamente se suceden en una jornada de pesca, ya sea por la actividad de los peces como de la metereología. A parte de la actividad física son muy importantes los conocimientos del material, del medio y sobretodo de las especies de la zona donde se pesca.

El nivel de nuestros deportistas de pesca a corcheo-mar cada día está más reconocido a nivel internacional, pues son muchos los éxitos conseguidos en los últimos años, tanto a nivel individual como a nivel de equipos y la evolución de la modalidad es contínua y se mantiene muy viva, a pesar de que estos éxitos raramente tienen visibilidad fuera del ámbito del colectivo que forman y rodeo a los deportistas que la practican.

Barcelona, Mayo del 2020, Christian Buscemi